Madrid ‘underground’
Este título no hace referencia a los clubes más modernos y alternativos de la ciudad. Con ‘underground’ nos estamos refiriendo, literalmente, a los pasadizos, estructuras e instalaciones que recorren las entrañas de Madrid, a varios metros bajo tierra.
Estación de Chamberí
Inaugurada en el año 1919, la estación de Metro de Chamberí fue clausurada en el año 1966. Desde entonces sufrió toda clase de incidentes (actos vandálicos incluidos) hasta que, ya en el año 2008, fue reinaugurado y abierto al público como centro de interpretación del Metro de Madrid.
El búnker del Parque del Capricho
Estos jardines, que datan del año 1787, disponen de un búnker de unos 2.000 metros cuadrados. Este refugio de la Guerra Civil española está abierto al público para visitas guiadas, las mañanas de los sábados y los domingos.
Pasadizos del Palacio Real de Madrid
En el siglo XVII, Felipe IV mandó construir una serie de pasadizos y túneles subterráneos que conectaban su residencia con algunos de los lugares clave de la ciudad de Madrid, tales como el Teatro Español, la Plaza de la Paja o el Monasterio de la Encarnación.
Pasadizo de Azaña
El Ateneo de Madrid fue uno de los lugares en los que literatos, políticos y escritores se reunían, conversaban y diseñaban lo que debía ser la España del futuro. El Ministro de la Guerra Azaña, tenía que alternar sus actividades en el Ateneo (donde se ubicaba su despacho ministerial) y sus tareas diarias en el Congreso de los Diputados. Para evitar ataques o posibles atentados, propios en la convulsa España de aquellos años, Azaña decidió diseñar unos túneles que cubrieran los 100 metros del trayecto.
Pasadizo del Banco de España
Los bancos nacionales siempre han generado todo tipo de fantasías y ensoñaciones entre los ciudadanos de a pie. El Banco de España no es ajeno a todo eso. Las entrañas de sus instalaciones albergan una cámara acorazada (denominada popularmente como la ‘cámara de oro’) que custodia gran parte de las reservas de oro de España (la tercera parte, para ser exactos). Como puedes ver en este enlace, cualquier intento de asalto se saltaría con la anegación completa de la sala. Esa es, probablemente, una de las razones que explican que nadie haya osado a intentar robar la cámara en sus 8 décadas de historia.